martes, 22 de enero de 2013

"Las mujeres fuertes pueden decir no" de Marge Piercy

Una mujer fuerte es una mujer esforzada.
Una mujer fuerte es una mujer que se sostiene de puntillas
y levanta unas pesas mientras intenta cantar Boris Godunov...
Una mujer fuerte es una mujer "manos a la obra"
limpiando el pozo negro de la historia.

Y mientras saca la porquería con la pala
habla de que no le importa llorar,
porque abre los conductos de los ojos...
Ni vomitar, porque estimula los músculos del estómago...
Y sigue dando paladas, con lágrimas en la nariz.

Una mujer fuerte es una mujer con una voz en la cabeza,
que le repite: "Te lo dije: sos fea, sos mala, sos tonta...
nadie más te va a querer nunca".
"¿Por qué no eres femenina,
por qué no eres suave y discreta...
por qué no estás muerta...?".

Una mujer fuerte es una mujer empeñada
en hacer algo que los demás están empeñados en que no se haga.
Está empujando la tapa de plomo de un ataúd desde adentro.
Está intentando levantar con la cabeza la tapa de una alcantarilla.
Está intentando romper una pared de acero a cabezazos...

Le duele la cabeza.
La gente que espera a que haga el agujero,
le dice:"date prisa...¡eres tan fuerte...!"

Una mujer fuerte es una mujer que sangra por dentro.
Una mujer fuerte es una mujer que se hace a sí misma.
Fuerte cada mañana mientras se le sueltan los dientes
y la espalda la destroza.
"Cada niño, un diente...", solían decir antes.
Y ahora "por cada batalla... una cicatriz".

Una mujer fuerte es una masa de cicatrices
que duelen cuando llueve.
Y de heridas que sangran cuando se las golpea.
Y de recuerdos que se levantan por la noche
y recorren la casa de un lado a otro, calzando botas...

Una mujer fuerte es una mujer que ansía el amor
como si fuera oxígeno, para no ahogarse...
Una mujer fuerte es una mujer que ama con fuerza
y llora con fuerza...
Y se aterra con fuerza y tiene necesidades fuertes...

Una mujer fuerte es fuerte en palabras, en actos,
en conexión, en sentimientos...
No es fuerte como la piedra
sino como la loba amamantando a sus cachorros.
La fuerza no está en ella,
pero la representa como el viento llena una vela.

Lo que la conforta es que los demás la amen,
tanto por su fuerza como por la debilidad de la que ésta emana,
como el relámpago de la nube.
El relámpago deslumbra, llueve, las nubes se dispersan
Sólo permanece el agua de la conexión, fluyendo con nosotras.
Fuerte es lo que nos hacemos unas a otras.

Hasta que no seamos fuertes juntas
una mujer fuerte es una mujer fuertemente asustada...

Marge Piercy (Detroit, Michigan, EE.UU., 1936)